#MundoRaro
¿Por qué no nos caemos de la cama mientras estamos dormidos?
¿Por qué no nos caemos de la cama mientras estamos dormidos?

Alguna vez te has preguntado por qué si cuando dormimos roncamos, hablamos, reímos, gritamos, nos arropamos y desarropamos, pateamos, nos acomodamos ¿Aún así no nos caemos de la cama?

Así caigamos rendidos en una cama individual o una king size, lo más seguro es que nos levantemos donde nos acostamos, sin importar cuán agitada haya sido la noche, obviamente con sus excepciones, pero ¿Por qué ocurre esto?

Si bien se piensa que al dormir estamos completamente desconectados de lo que nos rodea, la realidad es otra, pues nuestro cuerpo sigue recolectando información a través de nuestros receptores.

Esto es casi como un sexto sentido que definitivamente no se queda dormido cuando nosotros sí. Aunque tiende a no ser tan bueno cuando somos niños (pues es en la infancia cuando se dan más caídas de la cama) suele mejorar de gran manera con la edad.

Esta capacidad se conoce como propiocepción, siendo la conciencia que tenemos de dónde se encuentra cada una de las partes de nuestro cuerpo en el espacio.

La propiocepción es posible gracias a señales neurofisiológicas de los receptores en nuestros músculos, tendones, articulaciones y piel que le informan al cerebro sobre la longitud actual y el estiramiento de los músculos, la rotación articular, los cambios locales y la flexión de la piel.

Es así que podemos saber en qué dirección se están moviendo nuestras articulaciones, nos hace percatarnos de nuestra postura y equilibrio. La propiocepción nos permite determinar la posición, la velocidad y la dirección de cada parte del cuerpo, lo veamos o no.

Gracias a ello, cuando estamos dormidos, podemos movernos con toda libertad, pero sin caer al vacío fuera de los límites de la cama.