Con la música estando presente en la mayoría de la vida de las personas, está claro que a muchos nos encanta cantar. Ya sea en privado o en público, o si tengamos una voz agraciada o no, el ser humano ha dejado su cantar por cada rincón del mundo desde tiempos inmemoriales.
El canto es considerado una de las formas de expresión más universales y profundas de la humanidad, ya sea con melodías simples tarareadas que se nos pegan en cualquier lugar, hasta complejas composiciones en grandes ceremonias, pero ¿Desde cuando los humanos comenzamos a cantar?
Aunque no se tiene una fecha exacta de cuándo comenzó el canto, los primeros indicios sugieren que estuvo presente en rituales y ceremonias de las primeras civilizaciones del mundo.
Diversas pinturas rupestres y artefactos antiguos, como flautas hechas de hueso encontradas en cuevas, apuntan a que utilizamos la voz para acompañar a la música desde hace más de 40 mil años.
Durante la Edad Media, existían los ''juglares'', que eran personas dedicadas a entretener al público a través de sus cantos, donde jugaban un papel esencial en la comunicación y preservación de la historia y la cultura en sociedades mayoritariamente analfabetas.
El canto nos ayuda a entender más
Diversos estudios han encontrado que el canto facilita una mejor sincronización y cohesión social en comparación con el habla. En el canto, las personas tienden a emplear tonos más estables y uniformes al cantar, lo que podría mejorar la claridad y entendimiento del mensaje.
Esto sugiere que el canto no solo cumple una función recreativa, sino que juega un papel fundamental en la comunicación efectiva y la formación de vínculos grupales. A través del tiempo, el canto ha servido como una herramienta esencial para unir a las comunidades, transmitiendo información y emociones de manera que el habla por sí sola no puede lograr.
La conexión acústica y emocional entre el canto y la sociedad da a entender la importancia en la evolución social y cultural de la humanidad, lo que daría a entender por qué es que comenzamos a cantar. Prueba de ello es que hasta el día de hoy, seguimos educando a los niños a base de canciones infantiles.