Existe una gran cantidad de dichos y refranes que se han hecho populares y persisten a través de los tiempos.
"Agua que no has de beber déjala correr", "Al que madruga, Dios le ayuda", la lista es muy grande pero aunque puedan ser ciertos o no, parece ser que todos estamos de acuerdo de que algún dicho nos ha dado una lección.
La razón de esto es la rima y el ritmo, pues se ha descubierto que mientras más atractiva se nos haga una frase, ya sea por cómo se escribe o se escucha, más consideraremos como verdadera.
Este es el fenómeno conocido como "rima como razón", que dice que las rimas y ritmo en oraciones y frases aumenta su percepción de precisión y confiabilidad.
Los primeros dichos se transmitían de boca en boca, por lo que sus creadores buscaban que fueran fácil de recordar. Nuestra memoria registra mejor los versos, pues nuestros cerebros los codifican con mayor facilidad.
Es por esta razón que a menudo recordamos canciones durante muchos años, pero no lo que nos dijeron hace poco.
No es sólo la rima, sino también es el ritmo lo que utilizan estos dichos y otros textos clásicos, algo que se ha replicado hasta en las frases inspiradoras que encuentras en internet.
Al ser así de irresistibles, además de memorables, se repiten más, y la repetición da la apariencia de veracidad. Además, la rima y el ritmo hacen más bonitas las frases y eso hace que, sin querer, a primera vista nos parezcan ciertas.
Como dice el dicho: Lo que bien se aprende nunca se olvida, algo que aplica totalmente con estas peculiares frases